¿microSD en el móvil? Te cuento por qué ya casi no existen y si de verdad nos estamos perdiendo algo importante. ¡Spoiler: hay más de lo que crees!
El adiós silencioso de la microSD en los smartphones
Seguro recuerdas ese ritual casi sagrado de comprar una microSD para tu nuevo teléfono—sobre todo si eres fan de cacharrear como yo. Hace apenas diez años, era impensable tener un móvil Android sin esa pequeña tarjeta que te sacaba de apuros cuando la memoria interna colapsaba tras cuatro fotos y dos playlists offline.
Pero hoy los flagship como el Galaxy S25 o el Pixel 9 ni siquiera traen ranura para microSD. Y aunque algunos modelos económicos todavía la incluyen, está claro que su ciclo dorado terminó. ¿Por qué sucedió esto? Y más importante aún: ¿de verdad fue solo por diseño o hay intereses ocultos?
Vamos a desmenuzarlo desde mi trinchera geek y con ojo crítico.
Diseño minimalista vs. control del fabricante: ¿quién gana?
Las marcas argumentan que todo es por el diseño y la seguridad. Los teléfonos "unibody" lucen hermosos y resistentes al agua—eso sí lo reconozco—pero curiosamente siempre queda espacio para una SIM física (o dos), aun cuando afectan la misma certificación IP.

La realidad es menos romántica: controlar el almacenamiento interno permite vender versiones con más gigas a precios altísimos. Una microSD SanDisk rápida cuesta menos de 25€, mientras que saltar de 64GB a 256GB internos puede costarte mucho más… y ni hablar si tienes un iPhone.
Sí, los fabricantes alegan velocidad superior para justificarlo (y es cierto al grabar video 4K), pero la mayoría guardamos fotos, música y documentos donde una SD basta y sobra en velocidad. Es un movimiento tan comercial como técnico.
Evolución del usuario: streaming, nubes y menos coleccionismo digital
No podemos ignorar cómo ha cambiado nuestro uso del móvil. Ya casi nadie carga miles de canciones en MP3 o películas completas; Spotify, Netflix y Drive hicieron que nos olvidáramos de gestionar archivos locales.
Esto le vino perfecto a las marcas: menos necesidad de espacio "expandible", más dependencia del ecosistema cerrado… ¡y más datos personales sincronizados en sus nubes! Sí, se gana comodidad y respaldo automático, pero también se pierden opciones si quieres controlar tu info sin depender del WiFi o pagar extra por almacenamiento online.
Ejemplo real:
Cuando estuve viajando por Centroamérica con mala conexión, agradecí llevar una microSD llena de podcasts y mapas offline. Pero hoy esa flexibilidad ya no es posible en un flagship moderno.
Seguridad y velocidad: los argumentos técnicos (y sus matices)
Desde Android 6.0 Google limitó bastante lo que podías hacer con las microSD: ya no es tan fácil instalar apps ahí ni garantizar su actualización segura. El sistema quiere evitar problemas de corrupción o malware en tarjetas externas baratas o viejas.
Además, los chips UFS internos modernos son rapidísimos comparados con muchas SD genéricas; esto reduce cuelgues y mejora el soporte técnico global (menos variables = menos bugs). Sin embargo…
- Para multimedia común (fotos/video Full HD/música), una buena SD sigue rindiendo excelente.
- Muchos usuarios avanzados preferirían decidir ellos mismos qué riesgos correr—aquí entra el eterno debate entre libertad y conveniencia.
Lo que sí se ganó… y lo que perdimos realmente
Ventajas actuales:
- Teléfonos más sellados contra agua/polvo (IP68).
- Mejor rendimiento general al tener almacenamiento único rápido.
- Menos complicaciones técnicas para soporte/garantía.
Lo que echamos de menos:
- Flexibilidad total para transferir archivos rápido sin depender del cable/PC/nube.
- Ampliar espacio barato según tus necesidades reales (¡ideal para creadores!).
- Poder seguir usando tu colección digital sin suscripciones extra ni límites artificiales.
Hay quien dice que solo los nostálgicos lloran la muerte de la microSD. Pero creo firmemente que también es una cuestión de empoderamiento tecnológico: cuanto más cerrado es el hardware/software, menos margen tiene el usuario final para personalizar su experiencia o ahorrar dinero realmente.
¿Quedan alternativas reales?
Algunos gama media todavía traen slot microSD—especialmente Motorola o Samsung Galaxy-A—pero ojo: cada vez limitan más su uso solo a fotos/música (las apps quedan fuera).
También puedes recurrir a adaptadores OTG o servicios cloud… aunque nada iguala la simpleza plug-and-play de antes.
Si buscas mantener algo parecido:
- Explora modelos "rugged" empresariales, aún valoran modularidad.
- Considera tabletas/convertibles Android con ranura SD completa si te dedicas a fotografía/vídeo profesional.
- Sigue atento a movimientos open-source como LineageOS donde ciertos equipos mantienen soporte completo para SD externa.
Futuro cercano: ¿volverá la expansión física?
No parece probable mientras las ventas dependan tanto del upsell interno/cloud. Pero nunca digas nunca; tendencias como el "right to repair" podrían forzar un cambio si crece la presión social por dispositivos abiertos y reparables (más sobre este tema aquí).
Personalmente, seguiré apostando por gadgets modulares cada vez que pueda elegirlos—porque nada me gusta más que trastear mi propio hardware sin ataduras artificiales 😏
Preguntas frecuentes sobre las microSD en smartphones actuales
¿Qué móviles todavía permiten usar microSD?
Principalmente modelos gama baja/media como algunos Motorola Moto G o Samsung Galaxy A32/A52 aún incluyen ranura microSD, aunque suelen limitarse al almacenamiento multimedia externo.
¿Por qué desaparecieron realmente las microSD?
Las razones van desde mejoras técnicas genuinas (rendimiento/seguridad) hasta intereses comerciales como fomentar upgrades caros o potenciar servicios cloud propietarios.
¿La velocidad interna justifica eliminar la expansión?
Para vídeo 4K/profesional sí marca diferencia, pero para usos comunes (fotos/música/apps pequeñas) una SD rápida sigue siendo suficiente en muchos casos.
¿Existen alternativas prácticas hoy día?
Puedes usar memorias USB-C OTG, adaptadores inalámbricos o servicios cloud; ninguna opción iguala totalmente la practicidad directa y económica de las antiguas microSD.